El Real Zaragoza y la SD Huesca encaran su último partido de preparación, después de haber jugado ambos el pasado miércoles, y lo harán enfrentándose entre sí, este sábado, en el Premio Localidad de Zaragoza Memorial Carlos Lapetra. El cuadro blanquillo se muestra a la cita tras haber ganado en el Nou Estadi al Nástic de Tarragona -un contrincante de Primera RFEF-, con los muchos de Mario Soberón y Pau Sans (1-2); al tiempo que los azulgranas se anotaron el triunfo en el campo del Alavés (0-1) -conjunto que compite en la máxima categoría del fútbol español-.
El equipo que dirige Gabi Fernández ha sacado adelante sus cuatro amistosos de la pretemporada. Su primer duelo se festejó a puerta clausurada en el Ibercaja Estadio, el 26 de julio, y se saldó con una goleada ante el Deportivo Aragón (6-0), su aparato filial.
El Real Zaragoza sentenció el partido en la primera mitad con los tantos de Borge y Cuenca, y con un doblete de Aketxe. Y luego amplió su renta, en los primeros acompases de la reanudación, con 2 dianas de Moyano.
Posteriormente , el equipo zaragocista venció al Mirandés (2-0), en el que fue el primer choque disputado con público en el Ibercaja Estadio. Los de Gabi Fernández, muy superiores, merecieron un marcador más abultado. Dani Gómez adelantó a los blanquillos en la primera mitad, mientras que Mario Soberón sentenció el desafío en los últimos minutos.
En su siguiente partido, disputado el pasado sábado, el equipo blanquillo superó a la Sociedad Deportiva Tarazona (1-2) con los goles de Tasende y Pau Sans. Los locales marcaron por mediación de Armero, en la recta final.
En relación a la SD Huesca, también continúa invicto en la pretemporada. Empezó su recorrido con un triunfo en Tarazona (0-1), el pasado 19 de julio, gracias a un gol de Jorge Pulimentado a balón parado. Después se impuso a Osasuna Promesas (1-0), con un solitario tanto de Diego Aznar; y ofreció una actuación convincente en la ciudad navarra de Lerín, contra el primer equipo osasunista (0-2) al que tumbó con un gol de Iker Benito en propia puerta y un tanto de Kortajarena en los últimos acompases.